No sé como empezar. Sinceramente nunca sé como empezar un texto al escribir. Pero tengo mucho que escribir; o por lo menos hay mucho pasándome por la cabeza en este momento.
¿Alguna vez tuvieron un "héroe"? Bueno, especifiquemos. Una persona a la cual consideran su ejemplo a seguir, su inspiración, su razón para pensar que no todo en la vida es una porquería, o que vale la pena vivir y algún día pensar "Sí, hice lo correcto al no malgastar mi vida". ¿Alguna vez tuvieron que darle las gracias a una persona pero nunca tuvieron la fuerza de voluntad para hacerlo porque sintieron un cosquilleo en el estómago y un nudo en la garganta, algo así como miedo? No esa clase de miedo a una respuesta, sino esa clase de miedo a no encontrar las palabras o la manera justa para expresarse.
Pongámoslo así: Un ídolo.
¿Tuvieron uno alguna vez? Podrán pensar en ese típico artista músico, actor, chef, profesor, o cualquier persona con una profesión yo sí. Y no, su trabajo no entra en ninguna de sus categorías. Porque es colectivero. Es mi papá. No mi viejo; mi papá.
Ese hombre que uno a simple vista en él ve una persona con trayectoria, pero sólo de años, que a juzgar por su apariencia es un tipo muy común -me siento rara al escribir esto, cosa de repente- pero no. Él no es común, él no es como todos ustedes podrían pensar. Es especial. No voy a decir que es el mejor padre de todo el mundo porque no lo es. No voy a decir que es la persona más perfecta del mundo, porque ni si quiera lo pienso así. Pero en mis quince años de vida, JAMÁS, conocí a una persona tan sensata y tan capaz como él. Desde que nació fue miserable, su vida entera pudo haberlo sido de no ser por sus ganas de vivir bien, bien a su manera, siempre.
Pero, más allá de eso, mi papá es una persona de mente muy abierta y siempre busca repartirle eso a las personas que valora en serio. A veces me molesta que me agarre para hablar de política, porque bien sabe que odio la política. Pero una vez que se empieza a hablar con él, después uno no quiere dejarlo. Porque es ahí cuando te das cuenta de muchas que cosas que antes no sabías/pensabas/o simplemente no veías como eran. Cuando hablo con él me dan ganas de llorar de emoción, y pienso "Tengo suerte de tener una persona así a mi lado" creo que no a mucha gente de mi edad le pasa esto. Y juro que no sé como seguir, como explicar textualmente cuánto valoro pasar tiempo con él, y cuánto valoro su persona, cuánto y cómo lo admiro... Es algo que se siente, pero no se explica. Es imposible.
Gracias a mi papá cada día decido ser mejor persona, pensar en un mejor futuro para mí y ver como es realmente el mundo en el que vivo. No hablo sin saber, no repito lo que escucho o veo en la televisión (al menos no todo, o al menos no la basura televisiva), siempre tengo ganas de conocer un poquito más sobre qué pasa, y no en Facebook. Me quiero culturizar a toda costa, quiero llenarme de orgullo y después llenarlo de orgullo a él. Porque sé que todas sus esperanzas de saber que enseñarnos a mí y a mis hermanas todo lo que nos enseñó, no fue ni es un malgasto de saliva, esas esperanzas están puestas en mí. Y siempre que quiero mandar todo a la mierda me acuerdo de él y de todo lo que quiso y no pudo ser. Yo voy a ser todo eso. Por mí, por él, por los dos y nada más que por los dos. Porque es todo lo que tengo y lo que voy a tener hasta que me muera.
Hasta el final. La razón por la que voy a luchar hasta el final.
Mientras lo leía (ademas de llorar) se reproducía en mi cabeza My Hero de los Foo. "There goes my hero, watch him as he goes. There goes my hero, he's ordinary". Tu papá debe estar el triple de orgulloso de tenerte como hija, Lei, sos genial. Me dejaste sin palabras.
ResponderEliminarSos lo más de lo más. Te quiero mucho Aldana.
Eliminar